Fenómeno La Niña: fecha de llegada a Chile y Sudamérica

Quedan pocas semanas para que finalice el invierno en el hemisferio sur y recibamos la primavera con los brazos abiertos. A pesar de que se esperaba que La Niña ya estuviera presente en esta etapa, los pronósticos climáticos indican que aún hay posibilidades de que se manifieste antes del verano.

De acuerdo con el último reporte de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA), existe un 66% de probabilidad de que La Niña se establezca entre septiembre y octubre.

Impacto principal del fenómeno La Niña

Antes de detallar las implicaciones, es esencial comprender el funcionamiento de La Niña: esta fase forma parte de la serie de eventos de El Niño-Oscilación del Sur, que incluye El Niño, La Niña y un estado Neutral cuando ninguno de los anteriores está presente.

Cuando se considera que ha surgido El Niño, las temperaturas en el Océano Pacífico ecuatorial son superiores al promedio en más de 1.5 °C. Por el contrario, La Niña se presenta cuando estas temperaturas descienden por debajo de los valores normales, alcanzando menos de -1.5 °C.

En ausencia de ambos fenómenos, es decir, cuando las temperaturas del océano se mantienen dentro del rango normal, se encuentra en un estado de neutralidad. Los cambios en las temperaturas oceánicas desencadenan variaciones en el clima atmosférico.

Por ejemplo, durante El Niño, Chile experimenta altas temperaturas y precipitaciones abundantes. En contraste, con La Niña, las temperaturas caen bruscamente, se reduce la lluvia al mínimo y se inicia un período de sequía en el país.

Dado el próximo arribo de La Niña, los expertos anticipan que Chile se verá afectado por condiciones de sequía. Históricamente, este fenómeno ha contribuido a la prolongada megasequía que afecta al país desde hace más de diez años.

Edgardo Sepúlveda, investigador e ingeniero físico de la Universidad de Santiago de Chile (Usach), señaló: “Para nosotros en Chile, La Niña está asociada con periodos secos y escasas precipitaciones, a diferencia de El Niño (…). De hecho, los episodios de La Niña en la última década (2015 y 2020) fueron en parte responsables de la megasequía que atravesamos en Chile”.

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Según los registros de la Dirección Meteorológica de Chile, los periodos de sequía más severos en el último siglo coincidieron con las temporadas de La Niña en los años 1924, 1968, 1998 y 2019.

Raúl Cordero, climatólogo e investigador de la Usach, afirmó: “Esto demuestra la gran influencia de La Niña en las precipitaciones en la región central del país”.

En consecuencia, se observa con preocupación este fenómeno que, combinado con el cambio climático, augura un escenario desafiante para Chile y la región. “Es probable que volvamos a enfrentar un año con altos índices de sequía a finales del año”, advirtió Sepúlveda.

La combinación del calentamiento global y La Niña “redundará en una disminución de las lluvias. Cuando confluyen ambos fenómenos, se traduce en un año muy seco para Chile”, agregó Cordero.

“Esto podría generar un aumento en el estrés hídrico y nos expondría a cortes de suministro de agua en las ciudades de la zona central”, concluyó Cordero.

Los expertos proyectan que, de manifestarse La Niña antes del verano, la temporada estival será menos calurosa que en años anteriores, sin embargo, la megasequía, que tuvo un “respiro” en 2023, podría reavivarse.

Cuándo llega el fenómeno La Niña a Chile y Sudamérica

El informe más reciente de la NOAA menciona que La Niña tiene un 66% de posibilidades de establecerse entre septiembre y octubre, y se prevé un 74% de probabilidad de continuar presente durante noviembre y enero, abarcando así todo el verano austral.

No obstante, no todos los modelos climáticos coinciden con esta perspectiva. La Dirección Meteorológica de Chile (DMC) informó que la probabilidad de desarrollo de La Niña para septiembre y octubre es del 41%, cifra mucho menor que la estimada por la NOAA.

Por otro lado, el International Research Institute for Climate and Society (IRI) indicó una alta probabilidad de transición a La Niña en septiembre.

Recientemente, la Oficina Meteorológica de Japón afirmó que hay un 60% de posibilidades de que La Niña se manifieste desde ahora hasta el verano del hemisferio sur.