Vitalidad democrática: Miembro del congreso comparte su número de contacto
Un paso importante en la investigación
Se llevó a cabo una diligencia crucial en el caso Democracia Viva, conocido también como Caso Convenios o Líos de Platas, en el que se investigan transferencias millonarias desde seremías y gobernaciones hacia fundaciones. En esta ocasión, la diputada Catalina Pérez, actualmente suspendida de RD, optó por proporcionar su teléfono móvil para que el Ministerio Público verifique todas sus conversaciones de Whatsapp durante el tiempo en que se desencadenó el caso.
El Juzgado de Garantía de Antofagasta decidió extender la investigación hasta el 14 de octubre. Acompañada por su abogado, el penalista Gonzalo Medina, Pérez acudió a las oficinas de la Fiscalía Nacional para entregar directamente su móvil al fiscal regional Juan Castro Bekios, quien actualmente lleva a cabo diligencias en la capital.
Se confirmó la diligencia por parte del propio abogado a La Tercera. “Hoy nos presentamos en la fiscalía, ya que después de más de un año de investigación no hay pruebas de delitos cometidos por la diputada Pérez y queremos cerrar rápidamente la investigación. Por eso, decidimos entregar su teléfono celular para revisión. Esperamos que la completa inocencia de mi representada quede clara lo antes posible”, declaró.
Su entorno asegura que las cuentas bancarias de la diputada han sido revisadas y no se han encontrado fondos relacionados con su expareja y ex representante legal de la Fundación Democracia Viva, Daniel Andrade, ni con el exseremi de Vivienda de Antofagasta, Carlos Contreras, quien se encuentra en prisión preventiva en relación con esta investigación.
Declaraciones de la diputada
El 19 de abril de este año, Catalina Pérez se presentó en la Fiscalía Nacional para rendir declaración ante los fiscales encargados de la investigación del caso Democracia Viva, Juan Castro Bekios y Cristián Aguilar.
En calidad de imputada y acompañada por su abogado, Gonzalo Medina, Pérez explicó que cuando se le informó sobre posibles irregularidades, su entonces pareja y director ejecutivo de la ONG, Daniel Andrade, siempre le aseguró que “todo estaba en regla”.
Según su testimonio, su exjefa de gabinete, Romina Neumann, fue la primera en alertar sobre las supuestas irregularidades, lo que la llevó a preocuparse por el asunto.