CIDH rechaza la persecución de disidentes y detención injustificada de periodistas en Venezuela

CIDH rechaza la persecución de disidentes y detención injustificada de periodistas en Venezuela

CIDH condena la represión y detenciones arbitrarias en Venezuela

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha manifestado su rechazo a la persecución constante de opiniones contrarias y a las detenciones sin justificación de comunicadores en Venezuela tras las recientes elecciones, solicitando a la comunidad internacional denunciar las prácticas opresivas y la censura, que buscan infundir miedo en la sociedad venezolana.

Además, la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (RELE) de la CIDH reportó más de 1.500 arrestos desde el 28 de julio hasta el 19 de agosto, incluyendo al menos diez periodistas, con cuatro de ellos enfrentando acusaciones infundadas de terrorismo por su cobertura de manifestaciones. Se destaca también que al menos seis profesionales han optado por exiliarse por razones de seguridad.

Situación de abuso de poder en Venezuela

La RELE ha denunciado el uso abusivo del poder por parte del gobierno venezolano, que busca silenciar a quienes discrepan, especialmente en el ámbito electoral. Estas prácticas institucionales violentas buscan generar un clima de intimidación para mantener el régimen autoritario en el poder.

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Las detenciones, según la RELE, suelen estar precedidas por allanamientos y hostigamientos por parte de las fuerzas de seguridad, y en casos de procesos legales contra periodistas y activistas, se utilizan leyes restrictivas sin garantías judiciales ni derecho a defensa.

Entre los delitos imputados se encuentran terrorismo, incitación al odio, entre otros, destacando la manipulación de pruebas por las autoridades.

Estigmatización creciente del periodismo en Venezuela

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Durante el período postelectoral, se ha incrementado la persecución contra los periodistas y medios de comunicación en Venezuela, con registros y cierres, confiscaciones, deportaciones, amenazas, despidos injustificados, censura y extorsión, generando un clima de temor entre los profesionales de la comunicación que deben recurrir a medidas de seguridad para protegerse.

Se han difundido listas con información personal de personalidades, facilitando su detención, mientras que funcionarios los han calificado de manera despectiva. La estigmatización en medios independientes ha crecido, siendo tachados de diversas formas.

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Represión en el entorno digital

La CIDH ha alertado sobre la creciente criminalización y represión en medios digitales, con mayor vigilancia y censura, propaganda oficial, perfilamiento en línea y bloqueo de sitios web críticos. Esta acción ha limitado el acceso a información crítica y favorece la narrativa oficial de los resultados electorales.

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