La sorprendente supervivencia de los últimos neandertales
La fascinante supervivencia de los últimos neandertales
La historia de los neandertales continúa generando interés en la humanidad, tanto por lo que conocemos acerca de ellos como por las incógnitas que aún quedan por descubrir. A pesar de haber compartido período con los humanos modernos y de haber dejado su huella genética en nuestra especie, su desaparición sigue siendo uno de los grandes misterios de la prehistoria.
Un reciente hallazgo arqueológico ha sacado a la luz la existencia de un subgrupo neandertal hasta ahora desconocido, que se mantuvo aislado por más de 50.000 años. Este descubrimiento proviene de los restos de un neandertal llamado “Thorin”, encontrado en la cueva Grotte Mandrin en el sur de Francia, y podría proporcionar nuevos indicios sobre las causas de la extinción de los neandertales.
Descubrimiento revelador de una rara variedad de neandertal tardío que aporta nuevas pistas sobre su desaparición
El neandertal conocido como Thorin, en honor a un personaje de la obra “El hobbit” de J. R. R. Tolkien, vivió aproximadamente entre 42.000 y 50.000 años atrás, en una comunidad pequeña que, según análisis genómicos, se mantuvo aislada del resto de poblaciones neandertales por más de 50.000 años. Los científicos implicados en el estudio, publicado en Cell Genomics, sugieren que este prolongado aislamiento genético pudo haber sido un factor crucial en la extinción de esta especie.
Ludovic Slimak, investigador del Centro Nacional para la Investigación Científica (CNRS) de la Universidad Toulouse Paul Sabatier en Francia y coautor del estudio, explicó que: “Durante 50 milenios, dos poblaciones neandertales, separadas por unos diez días de viaje entre ellas, coexistieron sin tener conocimiento mutuo. Esto habría sido inconcebible para un sapiens y revela que los neandertales debían haber concebido nuestro mundo de manera muy distinta a la nuestra”.
Uno de los aspectos más enigmáticos del estudio es que este linaje de neandertales tardíos parece ofrecer nuevas pistas sobre los motivos que llevaron a la extinción de esta especie. A pesar de que convivieron con humanos modernos durante un tiempo considerable, su estructura social y su aparente falta de interacción con otras poblaciones parecen haber sido factores determinantes en su desaparición.
Impacto del aislamiento genético y social en la extinción de los neandertales
Tharsika Vimala, genetista de poblaciones de la Universidad de Copenhague y autora principal del estudio, argumentó que: “La interacción con otras poblaciones siempre es beneficiosa. Cuando estás aislado por mucho tiempo, limitas la variabilidad genética, lo que te hace menos capacitado para adaptarte a los cambios climáticos y a los patógenos. También te limitas socialmente al no compartir conocimientos ni evolucionar como grupo”.
Esta escasa diversidad genética y la falta de interacciones sociales habrían dejado a los neandertales en una posición vulnerable frente a los cambios ambientales y enfermedades. El aislamiento genético extremo, combinado con la incapacidad de establecer alianzas sociales sólidas, probablemente fue una de las causas de su extinción.
Nuevas perspectivas sobre la desaparición de los neandertales
El descubrimiento de Thorin desafía no solo las teorías existentes sobre la extinción de los neandertales, sino también sobre su periodo histórico. Los restos fosilizados de Thorin fueron encontrados inicialmente en 2015 en Grotte Mandrin, un sistema de cuevas ampliamente investigado que también albergó a los primeros Homo sapiens, aunque no simultáneamente, y que aún está siendo excavado.
Para resolver este enigma, los investigadores recurrieron a isótopos presentes en los huesos y dientes de Thorin, lo que les permitió concluir que vivió en un clima extremadamente frío, característico de los neandertales tardíos en la Edad de Hielo. A pesar de las discrepancias iniciales, el análisis isotópico confirmó que Thorin formaba parte de un grupo de neandertales tardíos que poblaron el sur de Francia durante la fase final de su existencia.
El hallazgo del genoma de Thorin refuerza la hipótesis de que los neandertales se organizaban en pequeños grupos aislados, a diferencia de los primeros humanos modernos que parecían estar más interconectados socialmente. Esta diferencia podría haber otorgado a los humanos modernos una ventaja crucial para su supervivencia y prosperidad, mientras que los neandertales, al carecer de estas conexiones, no lograron adaptarse a los cambios que los llevaron a su extinción.
La extinción de los neandertales sigue siendo un enigma, pero este descubrimiento brinda una nueva perspectiva que resalta la importancia del aislamiento social y genético en dicho proceso. Con la secuenciación de más genomas neandertales y la recopilación de datos adicionales, se espera arrojar más luz sobre los últimos días de esta fascinante especie.
El hallazgo del genoma de Thorin y su linaje aislado representa un avance significativo en el conocimiento de la evolución humana, subrayando la relevancia de la genética para abordar interrogantes fundamentales sobre la prehistoria. A medida que se realicen más estudios genómicos, los investigadores aspiran a descubrir otros linajes neandertales desconocidos que podrían haber coexistido en Europa en los últimos milenios de su existencia.
Este nuevo descubrimiento se convierte en una pieza esencial para el rompecabezas de la historia de los neandertales. Con mayor información genómica, los científicos confían en esclarecer por completo el destino de una de las especies más cercanas a los humanos modernos.