Deborah Einsenberg discute sobre Gaza y Alice Munro
El influyente New York Times la calificó como “la cronista de la locura estadounidense”, una manera tentativa de sintetizar y presentar su obra a los lectores. Sin embargo, la trayectoria literaria de Deborah Eisenberg (78) es mucho más intrincada. Primordialmente escritora de cuentos, nació en una familia judía en Winnetka, Illinois. Ha sido galardonada con el premio PEN/Faulkner y es miembro de la Academia Estadounidense de las Artes y las Letras.
Próxima a visitar Chile para participar en el ciclo La Ciudad y las Palabras, de la UC, ¿qué opina de esa etiqueta? En respuesta a Culto, Eisenberg dice: “Supongo que esa etiqueta tiene algo de sentido; es una manera de describirme, aunque de forma incompleta. Y es verdad que mi peculiar país, con su inquietante historia, su poder desproporcionado en el mundo, sus enfermedades culturales y sus consecuencias, etc., han ocupado bastante espacio en mi mente”.
La escritora Deborah Eisenberg es una de las cuentistas más destacadas de la literatura americana, la cual posee una rica tradición en el formato corto. Entre sus figuras más notables están John Cheever, Lucia Berlin, Sam Shepard, Lorrie Moore y Raymond Carver. Sin embargo, Eisenberg permaneció como una desconocida para el público hispanoamericano durante muchos años. Fue la editorial argentina Chai la que empezó a traducir y publicar sus obras en esta región, y sus libros ya están disponibles en nuestro país. Primero salió el aclamado volumen Taj Mahal en 2020, seguido de Relatos en 2021, y luego La venganza de los dinosaurios en 2023. Esto nos da pie para hablar sobre los elementos del género corto que más le atraen. Eisenberg, una entusiasta de la literatura, conecta de inmediato.
“Parece tonto decir que la diferencia es la longitud, pero esa es la diferencia: la extensión. Cada escrito requiere una extensión específica. Me irrito mucho cuando insinúan que la ficción corta es menos seria o menos sustancial que la larga, o que la breve es de alguna manera femenina. No creo que haya un retrato de las capacidades humanas más devastador, trascendente, duradero o revelador que el cuento de Isaac Babel titulado Cruzando a Polonia. Ninguna novela podría lograr lo que ese cuento logra en poco tiempo, aunque claro, tampoco querrías reducir Guerra y paz de Tolstoi a una página y media. ¿Y qué hay de las sutiles, resplandecientes e increíblemente efímeras historias de Katherine Mansfield? Añadir una palabra más podría derrumbarlas. Las elisiones en la buena ficción corta son embriagadoras: el lector se convierte en participante, no solo en consumidor. Esto no significa que tenga algo en contra de escribir una novela; si escribiera una, estaría encantada, y disfruto tanto de la ficción larga como de la corta. De hecho, una de las mejores experiencias de lectura de mi vida fue la impresionante traducción al inglés en cinco volúmenes de la saga de la dinastía Qing de Cao Xueqin, realizada por David Hawkes”.
¿Existe para usted lo que se llama ‘la gran novela americana’?
No. Hay varias excelentes novelas americanas, pero nunca he entendido la denominación de ‘la gran’.
El Proceso Creativo Tardío
Debutó en el ámbito editorial a los 41 años, una edad vista como tardía. ¿Por qué cree que le tomó tanto tiempo decidirse a publicar?
No es tanto que publicara tarde, sino que comencé a escribir tarde. Y no hubo decisiones involucradas, al menos no de mi parte. De hecho, no tenía un deseo real de publicar y era muy reservada respecto a expresar algo en papel. Sin embargo, tras mucho tiempo, les mostré una historia a dos amigas. La Amiga A insistió en hacer una lectura teatral, mientras que la Amiga B, quien es escritora de ficción, lo entregó a su editor, quien me llamó para ofrecerme un contrato para un libro. No estaba interesada en eso. La lectura teatral dirigida por la Amiga A resultó en una obra de teatro, y esa experiencia me dio tanto placer que seguí escribiendo, aunque fueron cuentos, no obras de teatro.
¿Se considera una escritora de ritmo lento?
Sí, definitivamente soy una escritora lenta. Hago todo lentamente, ¡aunque no es por elección! Camino lentamente, pienso lentamente, y soy una escritora y lectora extremadamente lenta.
Desarrollo de Personajes y Temáticas
En sus cuentos, se centra en los personajes y su mundo interior. ¿Qué le motiva a hacerlo?
Ese es el destino de un escritor de ficción: escribir sobre humanos. Nos preocupa saber qué tipo de criaturas son los humanos. La ficción está relacionada con la psicología, la antropología, la historia, la biología, la filosofía, la sociología, etc., pero es un ámbito más amplio, desordenado y libre que otras disciplinas. Es un desafío frustrante e irresistible para el escritor de ficción que la “vida real” parezca arbitraria y aleatoria, a menudo poco interesante y rara vez comprensible. Es fácil atribuir motivaciones a las acciones de cualquier persona, pero siempre somos, al menos subliminalmente, conscientes de que nuestras explicaciones son insatisfactorias y formuladas. El reto para los escritores de ficción es inventar cosas que sean verdaderas, tan complejas y misteriosas como la vida real, pero mejor ordenadas, más reveladoras y mucho más convincentes.
¿Cómo desarrolla sus personajes?
Oh, solo espero, trato de escucharlos atentamente y los animo a desarrollarse.
¿Es esta su primera vez en Chile y Sudamérica?
¡Sí, es mi primera vez en Chile! Hace casi 10 años, mi pareja y yo visitamos brevemente Buenos Aires, y esa es mi única experiencia en su gran y fascinante continente hasta ahora.
¿Conoce algo de la literatura chilena? ¿Algún autor o libro en particular?
Más sobre Libros
Es bastante humillante: apenas estoy familiarizada con la literatura chilena más allá de Neruda y Bolaño, ambos grandes autores. Tengo muchas ganas de conocerla mejor.
De Gaza a Munro
Usted fue una de los intelectuales judíos en EE.UU. que, en octubre de 2023, firmaron una carta solicitando al presidente Biden un alto el fuego en Gaza. ¿Por qué lo hizo?
El arte y la polémica son profundamente incompatibles, mientras que el arte y la pasión son inseparables. Se podría decir que el trabajo de los artistas e intelectuales es responder a la información y evaluar sus respuestas, pero la participación en asuntos actuales depende de numerosos factores. Soy judía. No soy religiosa y conozco poco de la historia judía o la cultura. No obstante, mientras exista el antisemitismo, debo considerarme judía. Como judía y ciudadana estadounidense, ¿cómo podría no pronunciarme sobre la matanza en Gaza? Mi postura fue (y sigue siendo) impopular, pero probablemente no me costó nada, aparte de algunos comentarios hostiles. Muchas otras personas hablaron a pesar de arriesgar relaciones importantes e incluso perder trabajos. Toda mi vida me he preguntado sobre las diferencias esenciales entre los europeos que no resistieron las demandas del Tercer Reich y aquellos que resistieron bajo amenaza de muerte. Si ni siquiera puedo alzar mi voz contra el asesinato masivo de niños cuando me cuesta tan poco, ¿qué haré cuando llegue el costo real?
¿Cuál es su opinión sobre el papel de Israel y el gobierno de Netanyahu en el conflicto?
Me duele profundamente criticar a Israel en público; realmente me causa migrañas. Sin embargo, debo hacer una distinción entre Israel y el brutal gobierno de Netanyahu. Los líderes autoritarios llegan al poder de maneras complejas, y aunque sean elegidos, solo reflejan el carácter del pueblo de manera distorsionada. La pequeña franja de tierra que es Palestina/Israel ha sido disputada durante milenios, y Gran Bretaña optó por “dar” la tierra, ocupada por otros, a los pioneros sionistas. Entiendo las razones de las represalias de Israel tras el ataque de Hamas del 7 de octubre, pero la escala y la barbarie de la represalia es un crimen enorme, incluso considerando otros conflictos en los que mi país ha participado. Es lo más repugnante y vergonzoso que he presenciado, y espero que no desvía la atención del sadismo de las políticas israelíes en Cisjordania.
En otro ámbito, ¿qué opina de la Inteligencia Artificial? ¿Cree que es una ayuda o una amenaza?
Podría llegar a ser beneficiosa en muchos aspectos, pero las posibles consecuencias son aterradoras. Los actuales estándares de comunicación parecen bastante degradados, en gran parte por la digitalización de la vida social y el comercio. Aunque los cerebros artificiales pueden resolver muchos problemas que los humanos no pueden o hacerlo más rápido, la IA es básicamente un grupo de discusión sofisticado. ¿Es esa la mejor manera de determinar las actividades mundiales? Personalmente, no creo que sea ni siquiera la mejor forma de editar una película. Ahora que casi hemos hecho inhabitable el planeta, parece que tenemos la intención de poblarlo orgullosamente con robots que están limitados a nuestras propias restricciones.
El Abuso Revelado
Recientemente, la hija de Alice Munro reveló que sufrió abuso sexual por parte de su padrastro y mencionó que su madre permaneció en silencio. ¿Qué opina de esto?
No he leído mucho sobre esto. De hecho, no creo que sea asunto mío. Lo que he leído es que la historia es dolorosa, perturbadora y desconcertante. Los relatos son turbios, incompletos y, a veces, contradictorios. El abusador fue Gerald Fremlin, el padrastro de la hija de Munro, Andrea Skinner. Skinner se lo contó a su madrastra, quien a su vez le contó a James Munro. Sin embargo, nadie se lo dijo a Alice Munro hasta muchos años después, y cuando ella se enteró, decidió quedarse con Fremlin. No entiendo por qué algunos adultos actuaron de esa manera, y probablemente nunca lo haré, al igual que la mayoría de las personas.
¿Cree que por ese episodio la obra de Alice Munro debería ser cancelada y no volver a leerse?
Me parece extraño que muchos lectores se sientan traicionados por la conducta de Munro. ¿Violan los escritores alguna promesa de adherirse a un código moral? Ahora que Munro está muerta, ¿serán sus páginas castigadas en su lugar? El gran poder de su escritura era su capacidad de describir sentimientos ambiguos y a menudo inaceptables, generalmente relacionados con conflictos románticos o sexuales. Eso es lo que admiraban los lectores, no una interpretación edulcorada de la vida rural. Si su vida no era intachable, ¿cambia la percepción sobre su escritura? ¿Deberían los santos escribir sobre humanos imperfectos o los imperfectos sobre santos? ¿O ahora se requiere que todos los escritores sean moralmente intachables? Eso dejaría muchos estantes vacíos. La escritura debe ser una zona libre. Si se exige que un escritor se ajuste a las ortodoxias del momento, solo se verá trabajo superficial y sin brillo, lleno de mentiras y sin utilidad.
Estados Unidos afronta próximamente las elecciones presidenciales. ¿Dónde estaba cuando se supo la noticia del tiroteo contra Donald Trump?
Estaba en casa, sola, tratando felizmente de olvidarme de las elecciones que se avecinan.
¿Por quién votará?
Votaré por casi cualquiera que no sea Donald Trump. Las excepciones incluyen a los hijos de Donald Trump y J.D. Vance.
Deborah Eisenberg estará participando en el Ciclo La Ciudad y las Palabras con la charla La ciudad y el cuento, junto a la escritora chilena María José Navia. Esto se realizará el martes 13 de agosto en el Auditorio de la Escuela de Arquitectura de la UC (El Comendador 1936, 4to piso, Providencia, Santiago).
Además, el ciclo también contará con la presencia del escritor peruano Fernando Iwasaki, quien realizará un Seminario de Lectura, los días 12 y 13 de agosto, a las 18.00 y 17.30, respectivamente. Esto en el Salón Sergio Larraín de la Escuela de Arquitectura de la UC. Las actividades de ambos autores son con entrada liberada, pero con cupos limitados. Para inscripciones, hay que mandar un correo a [email protected].
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